martes, 8 de julio de 2014

Ser Dios

Hoy mientras deambulaba por caminos polvorientos con mi coche-casa, he atropellado una liebre. Me joden mucho estas cosas, somos nosotros quienes hemos invadido su territorio y somos quienes nos cargamos animales que no tienen culpa de nada. Pero bueno, el caso es que atropellar al pobre animal me ha hecho pensar en que habrá sentido, en si habrá un cielo lleno de conejos... aunque suene muy raro.Y si hubiese un cielo para conejos liebres, ¿habrá un Dios de las liebres? ¿O será el mismo? es decir, ninguno.

Pero vamos a suponer que existiese, que realmente hubiese ahí un tipo que manejase el cotarro, un tipo que verdaderamente se encargase de estar pendiente de si te haces una pajilla para dejarte ciego, o que todo el día te estuviese vigilando a ver que pecado cometes para castigarte. La verdad, ser Dios molaría mucho. Me conformaría con ser Dios durante una hora, con eso sería suficiente. 
 
Sería capaz de poner todo en orden, todo ese caos, todo esa mierda que flota dentro y fuera de mi cabeza. Realmente no sabría por donde empezar, supongo que por mejorar lo bueno. Dios es amor, o eso dicen los curas cuando tienen un niño cerca, así que lo primero sería el amor, sería ser feliz. Lograr todo, todo eso que tantas veces echas de menos sin ni tan siquiera haberlo tenido nunca. 

Y luego, una vez conseguido eso... sería la hora de divertirse. A ver, a este hijo de puta... que le parta un rayo! con tan mala suerte que le calcine el escroto y por fin muera entre terribles dolores. Uhhh, no no no, eso no está bien. Demasiado rápido. Primero que lo metan en la cárcel, porque si, porque soy Dios, el puto amo del universo, y allí que se le caiga la pastilla de jabón todo el rato. Y luego ya lo del rayo, ahora si. 

Y tras divertirme con eso, pues ya a lo loco. Que si una plaga bíblica para PP y PSOE, que si un meteorito en el Vaticano, que si III República... todo cosas que parecen imposibles, pero como sería Dios podrían suceder. Me cargaría el pop español, a los gafapastas hipsters, a los camioneros y a los ciclistas, a los domingueros, me cargaría las redes sociales, destruiría el whatsapp y su código fuente lo enterraría en el centro de la Tierra, donde nunca nadie más pudiese encontrarlo. Me cargaría a los jefes que se sacaron el título haciendo botellón en un polígono, me cargaría la escuela y sanidad privadas, para que supieran lo que sienten los de la pública. Sustituiría a los políticos por chimpancés, eliminaría el puto cambio de hora, el verano, el calor, las mentiras y todo lo que huela a mierda. Solo habría amor de verdad, amor sincero, sin peros, sin tiempo ni espacio, sin pena.

Pero como no soy Dios, ni creo en él, lo siento por la pobre liebre, que nunca disfrutará de un cielo lleno de conejos. Y yo me comeré mi bocata de atún, mientras veo el Brasil-Alemania de esta noche.

2 comentarios:

  1. A veces el amor verdadero y desinteresado pasa por delante de las personas y no lo ven

    ResponderEliminar
  2. Hola, soy Dios.
    Estaba buscándome en Google y la página me ha traído hasta aquí, sé que soy un egolatra, pero es que soy Dios, te comento, lo de vigilar mientras os hacéis una "pajilla" cómo tu lo llamas, no es manejar el cotarro, aunque también lo controlo, es decir, sé lo que haces. Pero no digo nada, y mucho menos dejo ciegos, hombre por favor, en ese caso tooodos estaríais ciegos.
    Me he tomado la libertad de tomarme este texto cómo una experiencia no religiosa, y dado que yo estoy cansado, sí, comprenderás que son muchos años y muchas "pajillas" que vigilar, niños malos a los que azotar, plagas que crear, corrupción que plantar y demás putas mierdas que hay, y que no es que me gusten,es que de eso no me ocupo yo, se ocupan los doce, sí los Doce Apóstoles de los cojones, que van de amigos pero son tope vagos, tienen el puesto por enchufe y son malévolos.
    A lo que te voy, que me gustaría hacerte una entrevista personal y si estás interesado tomar mi puesto durante una semana, más no que me sale carísimo el hotel en Benidorm.
    Ruego se ponga en contacto conmigo, rezando un Padre Nuestro antes de acostarse.

    PDT: Sí, soy amor.

    ResponderEliminar